Después de dos años del lanzamiento del Windows Vista por Microsoft, los estudios han mostrado que rara vez las empresas deciden instalar este Sistema Operativo en sus ordenadores. Por tanto, según publica USA Today, la empresa de Redmond podría encontrarse bajo presión para sustituir cuanto antes la última versión de Windows por el nuevo SO.
Laura DiDio, principal analista en la firma ITIC ha declarado al diario estadounidense que Microsoft "debe conseguir el Windows 7 en buen estado, y debe conseguirlo a la primera". Con esta situación y con el crecimiento del uso de ordenadores Mac en las oficinas, Microsoft no podría permitirse fallos en su nuevo SO como les ha sucedido con Vista.
En un estudio realizado por las empresas consultoras ITIC y Sunbelt Software, entre los 700 ejecutivos encuestados se descubrió que sólo el diez por ciento había decidido instalar Windows Vista como SO para los ordenadores de la empresa.
Según Charles King de la firma Pund-IT, el gran reto de la compañía de Redmond sería conseguir que las empresas acogieran este nuevo Windows, pero cree que, a causa de la situación económica será difícil, ya que en épocas de crisis "tanto los consumidores como las empresas hacen lo que pueden para evitar comprar".
Vía: Silicon News
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